Quema de Xàtiva: incendio y exterminio de una ciudad

Felipe V ordenó la quema de Xàtiva el 19 de junio de 1707, durante la Guerra de Sucesión, provocando el exterminio de la ciudad.
Actualizado el 16 de octubre de 2020.
Xàtiva: datos curiosos
Al sur de la provincia de Valencia y, más concretamente, en la comarca de La Costera (de la cual es capital), se encuentra una de las ciudades pioneras en la fabricación de papel en Europa occidental. Xàtiva ostenta, orgullosa, el título de ciudad desde el año 1347, el cual le fue otorgado por el rey Pedro IV de Aragón, el Ceremonioso.
Asimismo fue, junto con Orihuela y Valencia, una de las ciudades más importantes del Reino de Valencia. En Xàtiva nacieron dos papas, además de diferentes artistas y personalidades destacadas, como el papa Alejandro VI (1431-1503) o el polifacético catedrático Vicente Boix (1813-1880), presidente honorario de Lo Rat Penat.
El perfil actual de Xàtiva viene presidido por su castillo, compuesto por los denominados castillos «menor» y «mayor». Tanto el conjunto de la fortaleza, como la ciudad, sufrieron los efectos de diferentes terremotos ocurridos en el año 1748. Entre otros edificios, la iglesia de Santa Tecla sufrió diferentes desperfectos y, debido a que ya había resultado dañada en el año 1707, durante la Guerra de Sucesión, se vino abajo.
La Quema de Xàtiva
La citada guerra, surgida tras el fallecimiento de Carlos II de España sin descendencia, sería la que desembocaría en la Quema de Xàtiva, convirtiendo la ciudad en un verdadero infierno.
En el conflicto bélico se enfrentaban los partidarios de Felipe V de Borbón y los del archiduque Carlos de Austria. Tras la cruenta Batalla de Almansa —en la cual salió victorioso Felipe V—, las tropas del Borbón, comandadas por el caballero francés d’Asfeld, asediaron la ciudad austracista de Xàtiva durante varias semanas hasta que, finalmente, esta capituló el 6 de junio de 1707.
Días más tarde, los supervivientes setabenses fueron deportados a Castilla. Como represalia, por la fuerte resistencia austracista, y para ejemplo del resto de lugares que apoyaban al archiduque Carlos de Austria, la ciudad fue incendiada por orden de Felipe V. Ocurrió el 19 de junio de 1707. Sobre todo, fueron destruidos los edificios oficiales, así como los archivos municipales, en los que se hallaban multitud de documentos referentes a los extensos territorios pertenecientes a la Gobernación de Xàtiva.
El Exterminio de Xàtiva
Afortunadamente, la ciudad no fue quemada por completo y, aunque quedaron algunos edificios en pie, le fue arrebatado el nombre para ser rebautizada como Colonia Nueva de San Felipe. La intención de Felipe V era borrar Xàtiva de la memoria y del propio mapa. Así, ordenó que se derribase cuanto había quedado en pie, y que se erigiera una nueva urbe, lo cual no se terminó de realizar por falta de presupuesto. El conjunto de tales acciones, o intenciones de Felipe V, son actualmente conocidas como El Exterminio de Xàtiva.
En torno a un siglo más tarde y, en parte, gracias a la labor del historiador setabense Joaquim Llorenç Villanueva, la ciudad dels socarrats («chamuscados», apelativo que hace alusión a la quema de Xàtiva) recuperó su nombre en las Cortes de Cádiz. Pero poco, o nada, se pudo hacer entonces para recuperar el patrimonio perdido, así como las numerosas vidas que siempre se llevan consigo las atroces e inhumanas guerras.
Enlaces de interés:
Lista y mapa de rutas en la provincia de Alicante.